La renuncia de Pablo Moyano no generó un quiebre en la CGT sino una transición de mando dentro del gremio de Camioneros, que mantendrá su silla en el triunviro de la central obrera. 

 

Octavio Argüello, un histórico dirigente del gremio en la rama de Recolección, es el nombre elegido por Hugo Moyano para reemplazar a su hijo, quien en su salida denunció que en la central son “siempre las mismas caripelas” y que era necesario ir a un nuevo paro nacional.

El anuncio del nuevo triunviro, puesto a discresión por Hugo, se confirmaría en las próximas horas y será una extensión del histórico dirigente de Camioneros, a diferencia de Pablo que mostró movimiento autónomos e incluso desafió a la CGT movilizando a parte del gremio junto a las CTA y los movimientos sociales, mientras los “gordos” bajaron el perfil y se sentaron a negociar con el gobierno de Javier Milei en la Casa Rosada.