VELEZ VS CENTRAL CORDOBA. Final Copa ARGENTINA 2024.
El Ferroviario lo ganó en el segundo tiempo con un centro de Godoy que, sin querer, terminó en gol. Gloria para el gran De Felippe y segunda final perdida para los de Quinteros en el año, justo antes de la del domingo. Piñas entre jugadores e hinchas del Fortín sobre el final.

 

La Copa Argentina de los milagros lo hizo de nuevo y Central Córdoba de Santiago del Estero, por primera vez. Historia grande construyó este miércoles por la noche el Ferroviario al imponerse a Vélez, el gran Vélez, por 1-0 y quedarse con el primer título de Primera de su vida (y la clasificación a la Libertadores 2025). Para el Fortín, segunda final perdida en el año y golpazo de cara a la definición de la Liga, el domingo contra Huracán (y Talleres).

Fue muy flojita -descripción generosa- casi toda la primera mitad de la gran final gran disputada en el estadio 15 de abril, en Santa Fe. Vayan dos situaciones a modo de retrato. Primero, una de Central Córdoba. El reloj marca la media hora de juego y hay lateral santiagueño en mitad de cancha. Abascia saca, Vázquez se la rebota para su zurda y Abascia, que es derecho, le pifia. La pelota se va para arriba y Vázquez, sin pudor alguno, la manda directo a la tribuna, por si las dudas. Ahora, una de Vélez: el hábil Carrizo queda mano a mano con el lateral Meli en pleno ataque velezano e intenta esquivarlo, pero la pelota le rebota a él y se va por el fondo. Carrizo camina varios metros para sacar el córner, a puro acting, mientras el juez de línea señala el saque de arco.

Lo de “casi toda la primera mitad” es porque cuando estaba todo listo para el entretiempo, porteños y santiagueños intercambiaron unas llegadas que despertaron a más de uno. Primero, Carrizo, Romero y Pellegrini manejaron imperfectamente una contra peligrosísima (3 contra 2) y el rubio terminó definiendo con Ingolotti muy encima. Luego, centro al área de Vélez y chilena perfecta de Godoy: era el gol de su vida y el de la del Ferroviario, pero Marchiori metió la mano y la mandó al córner.